Siempre con ganas de gritar!!!!

Al principio y al final resulta que haga lo que haga siempre tengo ganas de dar un grito. No así en plan por la ventana, si no mirarle a la cara y gritarle tipo Shrek, hasta que me salgan "babas" por la boca (así de gráfica que es una).

Le gritaría al (a ellas y a ellos) que me dice lo que tengo que hacer, al que me empuja por la calle, a todas las señoras (abuelas de maridos incluidas), al que llama a todos los telefonillos de mi edificio, al que no me da cambio para tabaco, al que me pisa cuando llevo chanclas, a los que se cuelan y ponen cara de despiste, al que me dice que no fume,a los que intentan obligarme a "estar con la roja", al camarero impaciente, a mi familia que me hace chantaje emocional para que vaya a una boda absurda.

Y a ti que me pones de mal rollo, que me crispas, me desestabilizas, me hundes, me destrozas, me ninguneas, me haces sentir inferior, me haces llorar de rabia, me conviertes en una especie de ser insensible y sin emociones, me impides fluir, me frustras, me desanimas, me provocas...

Y esta es la fase conocida como: "o hago algo rápido o perderé el control de mi misma". Y es verdad, puedes llegar a convertirte en lo que nunca has querido ser de un día para otro y cuando te das cuenta (no diré que es tarde, sería muy obvio) el camino de baldosas amarillas se ha borrado y ya no quedan migas de pan...